El bambú gigante no sólo es el más alto del mundo, sino también uno de los de más rápido crecimiento y más versátiles.
Originario del sudeste asiático, donde crece en bosques y riberas de ríos, el Dendrocalamus giganteus, también conocido como bambú gigante, es la variedad de bambú más alta y una de las más grandes. Estas plantas gigantes pueden alcanzar una altura de hasta 50 metros (164 pies), ¡eso es más alto que un edificio de 10 pisos!
El diámetro de los tallos individuales puede alcanzar los 35 centímetros (14 pulgadas), mientras que los entrenudos (secciones entre los nudos) tienen de 25 a 40 centímetros (10 a 16 pulgadas) de largo. Las paredes de los tallos son delgadas, rara vez superan los 2,5 centímetros (1 pulgada) de espesor, y se ramifican solo en la parte superior, donde producen hojas y flores.
Pero el bambú gigante no sólo es alto (y ancho), sino que también es rápido. ¿Qué tan rápido? Bueno, puede crecer hasta 40 centímetros (16 pulgadas) por día en condiciones favorables. El récord de la especie se estableció en Sri Lanka en 1903, cuando un brote nuevo creció 46 centímetros (18 pulgadas) en 24 horas. Eso significa que literalmente puedes ver el bambú crecer ante tus ojos.
Las flores se producen en grandes panículas (racimos ramificados) al final de las ramas, generalmente una vez cada 40 años, lo cual es notable si se tiene en cuenta que la planta solo tiene una vida útil de unos 60 años. El ciclo de floración es impredecible y varía según los factores ambientales.
Ahora bien, puede que te preguntes cuáles son los beneficios de cultivar una planta tan grande. Pues bien, el bambú gigante tiene muchos usos para los seres humanos y los animales. Por un lado, es comestible. Los brotes tiernos se cosechan y se cocinan como verdura o encurtidos. Son ricos en proteínas, fibra y minerales, y tienen un sabor dulce y crujiente. También se utilizan como forraje para animales, especialmente para elefantes y pandas.
Pero el bambú gigante no sólo es bueno para la alimentación, sino también para la construcción y la artesanía. Los tallos son extremadamente fuertes y duraderos, y se pueden utilizar para construir casas, puentes, muebles, instrumentos musicales y más. También son ecológicos, ya que secuestran dióxido de carbono y producen oxígeno. El bambú gigante también se utiliza para tejer cestas, esteras, sombreros y otros artículos. Las hojas se utilizan para techar y como mantillo.
Como puedes ver, el bambú gigante es una planta extraordinaria que merece nuestra admiración y respeto. Es un símbolo de fuerza, resistencia y belleza. Si quieres cultivar tu propio bambú gigante, necesitas tener un espacio grande y un clima cálido y húmedo, similar al que se encuentra en su India natal, Myanmar, Tailandia y la provincia china de Yunnan.
También es necesario regarla regularmente y abonarla con materia orgánica. Se puede propagar por semillas o división, pero hay que tener en cuenta que florece muy raramente (una vez cada 40 años, como se ha indicado anteriormente) y la planta puede morir tras la floración.
Sí, puedes disfrutar de la belleza del bambú gigante en tu jardín, ¡si tienes el espacio y el clima adecuados! Foto: Maria Vorontsova
Dicho esto, el Dendrocalamus giganteus es un magnífico bambú que puede aportar un toque tropical a su jardín. Si dispone de suficiente espacio y las condiciones adecuadas, nada debería impedirle disfrutar de su belleza y sus beneficios.
- 16 acciones